La ciudad de París (Francia) tiene la Torre Eiffel, Nueva York tiene la Estatua de la Libertad, y en el caso de la interiorana capital de la provincia de Herrera está el emblemático tanque de agua “Chitré Progresa”.
La obra fue el primer gran trabajo de fabricación y construcción especial de la firma Ingeniería Amado, S.A. (fundada en el año 1941), administrada por el señor Juan José Amado Burgos, de ascendencia chitreana. Para 1952 se concluyó la edificación del tanque de agua. Un dato de interés es que la firma es considerada la primera en fomentar en el país el uso de estructuras hechas de acero en la industria local de la construcción.
El tanque se le etiqueta como una obra peculiar porque se aplicaron diversos métodos innovadores de fabricación en Panamá. Un ejemplo son las planchas curvas con cortes mitrados, además de la gran cantidad de ensamble y soldadura aérea, consideraciones estructurales y sísmicas, sólo por mencionar algunos.
Cabe resaltar que en aquella época Panamá aún no tenía grúas tan grandes como para montar una estructura del tamaño del tanque de agua de Chitré. Es por ello que los ingenieros se valieron de mucha inventiva para armarla.
Respecto al diseño, el tanque cuenta con diez pilares de acero cilíndricos de 1.2 metros de diámetro situados en la periferia inferior. Asimismo, tiene una columna central de acero con un diámetro de 1.8 metros cuya función es la de llenar y vaciar el tanque.
El tanque, con una capacidad máxima de almacenamiento de 600,000 galones de agua, tiene un diámetro de 18.3 metros y 32 metros de altitud. El peso de la estructura (asumiendo que está llena del vital líquido) es de 2,263 toneladas. Posee en uno de los lados un sistema de boya con cable a un indicador que lo que hace es marcar de forma mecánica el nivel de llenado del tanque.
El objetivo detrás de esta obra es el de almacenar agua del acueducto para suplir las necesidades de Chitré sin que el flujo del líquido sea interrumpido. Teniendo una reserva de semejante tamaño a una altura considerablemente elevada, el agua puede llegar a la población por gravedad y sin tener que valerse de bombas a cada rato.
(Información y fotos de Juan J. Amado)
Buenos días
Mi abuela Esther Judith Rodriguez Garcia, con 86 años de edad, fue la reina en la inaguración del mismo. Prueba de ello se le pintaba un cuadro.
Dicho cuadro está en casa de mi abuela. Empollerada con su corona. Con 18 años (1952).