En la actualidad, sería más que difícil imaginarnos en Panamá a cada conductor de vehículo manejando por el carril izquierdo. Pero, aunque parezca mentira, hubo una época cuando era la norma conducir por ese lado de la vía.
Cuando surgieron los primeros vehículos de la historia, estos eran manejados por manijas, algunas de las cuales se asemejaban a las palas en veleros y motores fuera de borda. El conductor debía ir sentado en el medio.
Al poco tiempo, la dirección de los autos se empezó a construir a la derecha, siguiendo la costumbre de los vagones y los coches. En cuanto al timón en forma de manija, este se cambió por un volante.
Respecto a qué lado de la carretera sería utilizado para conducir, en la mayoría de los países la izquierda fue la opción inicial. Luego se eligió la derecha en gran parte de las naciones europeas, con la excepción de Inglaterra y sus colonias.
En los Estados Unidos, se comenzó a conducir por ambos lados antes de la Revolución Industrial, dependiendo del país. Después de pasado el tiempo de la revolución, se convirtió en una especie de regla no escrita que se conduciría por la derecha.
Así, cuando los primeros automóviles vinieron a ser construidos en los Estados Unidos a finales del siglo XIX, la dirección fue colocada a la derecha. Sin embargo, la Ford Motor Company decidió hacer las cosas de manera diferente al lanzar en 1908 el modelo Ford T, cuya dirección estaba a la izquierda, tal como aparece en la imagen de abajo.
En el caso de Panamá, ¿de qué lado se manejaba al principio? Se conducía por la izquierda debido a que muchos de los cocheros venían de las Islas Británicas en el Caribe, donde conducían a la izquierda.
Como el tráfico evolucionó gradualmente en favor de los carros en lugar de los coches, se siguió conduciendo por la izquierda. Pero había un detalle incómodo: Casi todos los vehículos venían de los Estados Unidos, los cuales tenían la dirección en la izquierda.
Cuando el tránsito de automóviles era pequeño, la mayoría de los conductores pensaron que era una ventaja, ya que se sentían menos propensos a salirse de las estrechas carreteras. Pero a medida que la circulación aumentaba, también lo hacían los trágicos accidentes causados por los intentos de rebasar vehículos por las carreteras del interior del país.
El procedimiento era moverse hacia el lado derecho para ver si el camino estaba despejado por delante y luego acelerar para avanzar. Con el timón del lado izquierdo y manejando en carril izquierdo, esta maniobra era extremadamente peligrosa, incluso en una recta de autopista.
Hacia 1936, se inició un esfuerzo para cambiar el tráfico de izquierda a derecha. La mayor objeción provino de los propietarios de autobuses que tendrían que absorber el costoso procedimiento de cambiar las puertas de sus vehículos a la derecha. Aparte de eso, existía la resistencia habitual al cambio de parte de algunos conductores.
El esfuerzo se prolongó hasta el inicio de la Segunda Guerra Mundial. El aumento de personal y vehículos militares, así como el personal civil necesario para operar el canal crearon un problema de logística de proporciones mayores.
Para 1943, era evidente que el cambio ya no podía aplazarse. Después de meses de estudios, organización y promoción, finalmente llegó el día cero: 15 de abril de 1943. En la madrugada de ese día, sólo los caballos tuvieron problemas cuando todo el tráfico en Panamá cambió de izquierda a derecha.
Fue un día memorable para los conductores en Panamá y la Zona del Canal. Semanas antes de aquella fecha, la publicidad en los periódicos y en la radio fue incesante. Las fuerzas policiales de Panamá y de la Zona del Canal recibieron un entrenamiento de cómo proceder ante este nuevo cambio.
A las 5 de la mañana de ese día de abril, las sirenas de la sede de los bomberos en las ciudades y la de los municipios de toda la nación se dispararon durante diez minutos consecutivos. Todos los vehículos en las carreteras se detuvieron y luego, como si estuvieran ensayando un ballet lento, cambiaron al lado derecho de la vía. Para la sorpresa completa de todos, el cambio tuvo lugar sin el menor incidente o inconveniente.
La prensa informó que los únicos que experimentaron algo de dificultad fueron los caballos, que se negaron a cambiar al otro lado de las calles. Aparentemente, los animales no podían entender por qué no se les permitía seguir circulando por el lado que siempre habían usado.
A continuación, varios fotos que datan de entre la década de 1910 y 1930, dejando ver lo común que era manejar por el carril izquierdo.
Que bueno e interesante saber historias de Panamá de como era antes…
interesante relato sobre coches arriados por caballos que los conducían por lo que hoy sería imprudencia, pero mas notorio es saber como las autoridades se prepararon para ese gran cambio.
Excelente artículo!
Q bien..ibteresante
Me alegra mucho haber encontrado esta página. Todo panameño debe interesarse por conocer la historia de su país.